Encerrados

-¿y qué se supone que vamos a hacer aqui?-preguntó Arthur desesperado
-no tengo idea, estamos encerrados-respondí afligida
-pues, yo tengo sed, venden botellas de agua en la recepción, ¿me acompañas?-le preguntó Kate a Arthur
-por supuesto ¡vamos!-dijo Arthur sonriendo.

Salieron los dos caminando y Axel y yo nos quedamos solos.
No le hablé ni lo miré, sólo me senté en una silla y miré como caían ruidosamente las gotas de agua. Él hacia lo mismo que yo, pero estaba sentado del otro lado del salón.
Volteé a verlo con una mirada fugaz, pero la desvié apresuradamente cuando me di cuenta de que él me estaba mirando detenidamente,bajé mi mirada hacia el suelo.

Oí sus pasos dirijiendose hacia donde yo me encontaba pero no lo miré,respiré agitadamente y cuando se encontraba a un par de metros y se sentó en la silla contigua a la mia,lo miré.

Me sorprendí mucho al mirar detenidamente todo su rostro y descubrir que sus mejillas estaban de un color rojizo muy visible, no me miró por un rato, pero justo cuando yo dejé de observarlo, sentí sus ojos verdes en mí, y de nuevo de la misma forma que antes, profunda y penetrante como si pudiera hablar con la mirada.

Estaba a punto de hablar pero él me ganó y habló apresuradamente:

-¿aún quieres conocer la ciudad?-preguntó dudoso
Recordé la propuesta que me habia hecho de ser mi guia para "conocer" mejor "Port Spirit" y le contesté emocionada:
-por supuesto-sonreí
Observé como miraba detenidamente mi sonrisa:

-pues, si quieres podemos ir el Sábado¿puedes?-dijo esperanzado
-supongo que si, mientras no llueva-le respondí riendome
-invité a Arthur¿no te molesta?-
-claro que no,pero en ese caso invitaré a Kate tambien¿no te molesta?-le dije mas bien como afirmación y no como pregunta.
-para nada, además será divertido ver la reacción de Arthur cuando le diga que va a ir Kate-dijo Axel sonriente
-es verdad-nos reimos juntos.

Pasó un silencio tranquilo, aunque no incómodo.

-por cierto...no tengo tu número de celular, por si cambias de opinión o algo-
-no cambiaré de opinión, no te procupes, pero te lo diré-le respondí ingenua.
Me sonrió estrechamente y sacó su celular, despues intercambiamos números.
-genial-pensé para mi misma al ver la lista de numeros de mi celular y leer "Axel" en ella.

Nos salimos del salón despues de eso, buscamos a Kate y Arthur en la recepción y vimos que estaban sentados en un escalón del porche, charlando animadamente.
No pensaba interrumpir algo asi, me senté en una banca larga que se encontraba en el corto pasillo, en frente del cual se encontraba una enorme ventana y se podia ver como caia la lluvia. Aun me parecia facinante ver como caian gotas de agua del cielo, pero mas facinante aun me pareció tener a Axel a mi lado, estabamos muy juntos el uno del otro, y me sentia muy tranquila y protejida al estar junto a él.
El sonido de las gotas era muy relajante, no paraba de llover, asi que me recargué en la banca y estuve en silencio, usando mis sentidos para tratar de concentrarme en las gotas que caian.